La I+D+i de Murcia, potencia emergente en la industria cosmética: seguridad y calidad garantizadas

Parque Científico de Murcia

Desde 2012, el laboratorio tecnológico murciano Almabe y el Instituto para el Desarrollo y Uso de la Química de Consumo (IDUQC), ubicados en el Parque Científico de Murcia, se han destacado en la monitorización, I+D+i y control de cosméticos, cumpliendo con la legislación europea que prioriza la seguridad y libre comercio de esta clase de productos.

Con un peso significativo en la industria, Murcia se posiciona como un referente en la fabricación de cosméticos en España. Miguel Martínez, responsable del laboratorio explica los rigurosos procesos de control y las innovaciones que definen el sector cosmético actual.

¿Esto cómo es y desde cuándo lo hacen?

Todos los cosméticos que se vendan en Europa están armonizados por la misma legislación. Es una necesidad impuesta por el rigor de la UE. El control que se debe hacer sobre esos productos para el cumplimiento de la legislación hace que se puedan vender con total garantía en toda la Unión Europea y que haya un libre comercio decosméticos, a raíz de la exigente legislación comunitaria. Nosotros como empresa, desde el Parque Científico de Murcia, estamos haciendo este trabajo desde el año 2012 e intentando monitorizar todo aquello que por ley es necesario que tengamos controlados en el mercado europeo.

¿Murcia es una potencia en la fabricación de cosméticos?

La verdad es que sí. En la fabricación de cosméticos España es una potencia y, dentro de nuestro país, Murcia es un referente en la fabricación de cosméticos. Siendo una comunidad autónoma uniprovincial, y no de las mayores, sin embargo, su peso específico en la industria cosmética es muy significativo. Solo superado por Cataluña, Madrid o incluso Valencia. Está muy bien posicionada en relación con esta industria.

¿Qué tipos de controles se hacen a estos cosméticos: calidad, eficacia, trazabilidad...?

Pues justamente todo ésto. Los cosméticos como cualquier producto de consumo son susceptibles, evidentemente, de ejercer sobre ellos una trazabilidad que es la que finalmente nos va a garantizar la seguridad para el consumidor. La razón final de toda esta serie de controles es proporcionar garantías absolutas. El producto cosmético ha de ser totalmente fiable en su utilización porque lo usamos durante toda la vida, todas las personas y mucho tiempo. Es vital y es de responsabilidad que el producto que se ponga en el mercado sea intrínsecamente seguro y para la comprobación de esta propiedad. Es para lo que hacemos los controles.

Y en estos casos, por ejemplo, ¿hay cosméticos que pueden tener componentes biológicos, que vengan de materias vegetales o animales? ¿Es cuestión de ver la durabilidad del producto? ¿A qué pruebas se someten?

Si lo que se requiere es hacer un ensayo de la estabilidad de los productos o en un ensayo de su comportamiento microbiológico o un ensayo de su eficacia, dependiendo de lo que queramos mirar, se hacen una serie de pruebas u otras. Y, evidentemente, estas pruebas o bien se hacen por toma de muestra de un lote y análisis de esta muestra, o bien, por pruebas de consumidor. Estos mismos lotes, se pueden chequear o testar, en relación con su aceptabilidad o su eficacia sometiéndose a pruebas de panel, de consumidor o de expertos, que nos indican si un producto, en relación con otros, está por encima o por debajo de los estándares que se les marquen.

¿Sus clientes van más allá de la Región de Murcia?

Al ser el mercado de la cosmética un mercado global, cualquier empresa, esté situada donde esté, ya sea en la Región de Murcia o fuera, que quiera vender productos en la Unión Europea, tiene que adaptarse a esta legislación. Por tanto, nosotros desde Murcia, con nuestro laboratorio, atendemos a compañías de toda Europa y de fuera que quieran poner productos en la UE. Nuestra misión es justamente la de facilitar esta puerta al mercado mediante los controles y la trazabilidad necesaria y exigida por el marco normativo. Todo producto cosmético que llegue a Europa debe estar sometido a una serie de controles y estar refrendado por un informe de seguridad que garantice que es perfectamente utilizable por cualquier usuario de los países miembros.

¿Cuáles son las posibles tendencias que puedan sorprender a los consumidores de los productos que estén llevando al laboratorio?

La industria de los cosméticos es bastante innovadora e intenta seguir las tendencias que la propia sociedad demanda. Hoy en día, no solo en cosméticos sino en otros sectores industriales también, cada vez más el consumidor es sensible a razones de sostenibilidad, medio ambientales, de equilibrio de los productos, de bajo impacto, de baja huella de carbono o de baja huella hídrica. Y todo esto repercute también en las innovaciones de los cosméticos que, justamente, van siguiendo el conseguir esta tendencias que la sociedad actual demanda. Un cosmético de hoy en día y un cosmético de hace 20 años, en cuanto a composición y en reivindicaciones posibles es muy diferente. La cosmética es una industria muy activa en relación a cómo adecuarse con las tendencias que marca en el mercado.

¿Un cosmético de ahora y un cosmético de hace 20 años en qué se puede diferenciar?

Hay materias primas, hay sustancias, que se ponían hace un tiempo y que actualmente ya no se puede por razones de seguridad. Hay muchísimas situaciones en las que hemos visto que productos que habitualmente han formado parte de la formulaciones y que ahora no lo están.

Por ejemplo, hay algunas sustancias de los compuestos que pueden tener características alergénicas para nuestra piel, el número de sustancias que se han declarado como alergénicas y, por lo tanto, se han prohibido en cosméticos, se ha pasado de prácticamente ninguna, hace 20 años, a actualmente unas 100 sustancias que no se pueden poner en los cosméticos. Esto limita la durabilidad de los productos pero aumenta la seguridad del consumidor. En esta tendencia tenemos grandes avances. Otro ejemplo, los cosméticos son productos que llegan al consumidor en un envase, esta legislación, esta seguridad, también cubre el continente del cosmético. Hay muchos componentes de estos envases, algunos de ellos que son plásticos, que hoy en día no se pueden utilizar para cosméticos por el riesgo de que estando en el envase puedan migrar al producto y del producto al consumidor. Hay una serie de compuestos, cada vez más, que se han visto que pueden interferir negativamente con el uso del consumidor y se han ido restringiendo, incluso, en el envase del cosmético, elementos como ftalatos que en un momento determinado eran de uso habitual por su gran capacidad plastificante, pero hoy en día no, no se pueden por estas circunstancias.

¿Cuantas personas trabajan en el laboratorio?

Directamente en el laboratorio, en el equipo somos 7 personas las que estamos implicadas en las tareas del laboratorio.

¿Laboratorios como este hay muchos en el conjunto de la Unión Europea?

Hay alguno más, no somos los únicos. Hay laboratorios de ámbito nacional, pero hay multinacionales del laboratorio que tienen secciones directamente automáticas. Laboratorios  especializados en cosmética, especializados en productos de consumo como el nuestro, hay menos. Grandes laboratorios que hacen control de cosméticos hay algunos más.

¿Es un club bastante exclusivo?

La industria cosmética tiene un gran impacto socioeconómico y, por nuestra parte, el aportar, contribuir, colaborar y acompañar a esa industria con labores como técnicas nos hace sentir especialmente orgullosos de lo que hacemos.