Aldea del futuro, aúna tradición y tecnología

Parque Científico Tecnológico de Gijón

​​​​​​Peón (Villaviciosa) lidera un proyecto para convertir a las aldeas asturianas en prototipos del siglo XXI, en los que experimentar una nueva viabilidad económica, comunitaria y ecológica. Junto a Peón, donde está ubicado el Centro Tecnológico de CTIC para el medio rural, Centro Tecnológico ligado al Parque Científico Tecnológico de Gijón, participan en este novedoso programa piloto las localidades de Porrúa (Llanes), Asiegu (Cabrales) y Moal (Cangas del Narcea), junto con otras aldeas del Norte de Portugal y de Galicia, con la previsión de incorporar al plan a núcleos de Cantabria.

El proyecto, denominado “Aldea 0”, fue presentado a mediados de marzo en Peón por el Comisionado para el Reto Demográfico, Jaime Izquierdo, el consejero de Medio Rural, Alejandro Calvo, y los responsables del CTIC, Pablo Priesca y Roberto Paraja. Un proyecto que seguirá en marcha hasta finales del año que viene y que tiene varias vertientes.

La intención primigenia es la de recuperar las economías de las aldeas, perdidas hace más de un siglo con la industrialización, aplicando las nuevas herramientas y oportunidades. Para ello se están poniendo en marcha prototipos de actuación en las cinco aldeas mencionadas, en las que se busca potenciar una economía sustentada en “infraestructuras y servicios públicos accesibles, una comunidad local dispuesta a trabajar en el proyecto y crear redes, un sistema agroecológico local, un sistema energético que busque la autosuficiencia energética de las comunidades.

También se pretende lograr un sistema local de empresas diversificadas, impulsadas por la llegada del turismo rural y nuevas formas de vivir en la aldea, desde el teletrabajo hasta la presencia cada vez más habitual de nuevos perfiles como los de los artistas.

Se está trabajando en acciones específicas que pueden ser replicables en otros puntos, de manera que estas aldeas funcionen como pilotos y para replicar en otros lugares. Para ello ya se han diseñado varias actuaciones definidas. Por una parte, la creación de un “rebaño comunitario”, de gestión comunal por toda la aldea, en el que el ganadero se conciba como un gestor del terreno, con aplicaciones tecnológicas como el uso de sistemas de seguimiento del rebaño y los efectos que produce sobre el suelo.

Asimismo, se ha creado un sistema de trazabilidad para la sidra basado en la tecnología “blockchain”, que se aplicará a los llagares acogidos a la Denominación de Origen Protegida. Con ello, se permitirá conocer todo el proceso de elaboración de la sidra y procedencia de la materia prima con total seguridad.

El apoyo a las iniciativas empresariales locales será otra de las líneas de actuación del proyecto, detectando y asesorando los planes que se vayan presentando los emprendedores desde el ámbito rural. También se está trabajando en la creación de un plan de encuentro intergeneracional en el ámbito de la aldea, involucrando a jóvenes y mayores para compartir el conocimiento y que ese saber perviva para las generaciones futuras, idea que se desarrollará en colaboración con las escuelas rurales.

Y por último, CTIC pondrá en marcha una plataforma para almacenar el conocimiento tradicional de las aldeas, de manera que se revalorice la cultura local.

Con todas estas herramientas, el horizonte que se plantea es el de poder cohesionar el territorio y atraer nuevos pobladores a un entorno que ha ido quedando progresivamente abandonado.