900 m2 de infraestructuras para estudios de imagen biomédica al servicio de la comunidad científica

30/04/2020

Parque Científico y Tecnológico de Gipuzkoa

La Plataforma de Imagen Molecular y Funcional de CIC biomaGUNE dispone de tecnología puntera y profesionales expertos en imagen preclínica y nanomedicina

La plataforma ha sido diseñada para abordar proyectos de investigación in vivo longitudinales y multimodales de múltiples patologías

El Centro de Investigación Cooperativa biomaGUNE, dedicado a la investigación más puntera en biomateriales, cuenta en su Plataforma de Imagen Molecular y Funcional con infraestructuras de las que puede valerse la comunidad científica. Esta plataforma, que tiene una extensión de 900 m2, es una estructura de bioimagen integrada, gestionada por profesionales expertos, que ofrece una instrumentación de imagen preclínica de última generación, como son la tomografía por emisión de positrones (PET), la tomografía por emisión de fotón único (SPECT), la tomografía computerizada (CT), la imagen por resonancia magnética (MRI) y la imagen óptica. Incluye, además, un laboratorio radioquímico con un ciclotrón biomédico, equipamiento microscópico avanzado, así como un animalario para pequeños roedores, con acreditación de la Asociación para la Evaluación y Acreditación del Cuidado de Animales de Laboratorio (AAALAC).

La Plataforma de Imagen Molecular y Funcional de CIC biomaGUNE, reconocida por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades como Infraestructura Científica y Tecnológica Singular (ICTS) en imagen biomédica, ha sido diseñada para desarrollar proyectos de investigación innovadores en el área de la imagen preclínica molecular y funcional y de la nanomedicina, y está abierta a colaborar con grupos de investigación o empresas nacionales o internacionales, ofreciendo el conocimiento, la infraestructura y la experiencia de que dispone para llevar a cabo proyectos preclínicos longitudinales y multimodales.

Jordi Llop, investigador principal del laboratorio de radioquímica y de imagen nuclear de CIC biomaGUNE, afirma que “en la misma instalación están aglutinadas todas las técnicas de imagen —bajo una misma dirección—, un ciclotrón y un laboratorio de radioquímica en el que se puede hacer todo tipo de agentes de contraste y trazadores para la investigación in situ, y eso nos da unas capacidades de abordar estudios y una flexibilidad y velocidad enormes”. Asimismo, la plataforma cuenta con un escáner de resonancia magnética de 11,7 teslas, “el más potente de su clase y único en toda la Península Ibérica”.

Estudios longitudinales y multimodales de múltiples patologías

La plataforma ofrece diversas posibilidades a los centros de investigación, universidades, hospitales y empresas que necesiten “hacer estudios no invasivos, estudios in vivo, en los que se monitoriza la evolución de los pequeños roedores a lo largo del tiempo, combinando varias técnicas de imagen. Cabe destacar que no estamos orientados hacia una única patología, sino que abordamos y somos expertos en proyectos relacionados con enfermedades neurodegenerativas, cerebrovasculares, oncológicas, cardiovasculares, pulmonares, desordenes metabólicos, toxicología, etc. Además de contar con un catálogo de unos 30-40 radiotrazadores, existe la posibilidad de hacer otros a la medida de cada proyecto, porque cada patología se mira de una manera distinta”, remarca el doctor Llop. Asimismo, la plataforma cuenta con expertos en el desarrollo de nanorradiotrazadores y permite utilizar sistemas de nanopartículas con aplicaciones teragnósticas (es decir, que sirven tanto para terapia como para diagnóstico).

Las aplicaciones son muchas, pero, en términos generales, Jordi Llop resume así la actividad de la plataforma: “En el proceso de desarrollo de fármacos es necesario realizar pruebas de diana (comprobar si el fármaco llega a donde tiene que llegar), pruebas de mecanismo (demostrar que el fármaco activa o inhibe las reacciones tal y como se espera) y pruebas de eficacia (demostrar que el fármaco tiene el efecto de cura que se espera de él). Asimismo, se puede estudiar cómo una determinada patología afecta a determinados mecanismos del organismo. Las técnicas de imagen in vivo brindan la oportunidad de realizar estudios longitudinales, y eso facilita la traslación de esos estudios al entorno clínico, es decir, será más fácil llevarlos a la fase clínica en humanos”.

Actualmente, están trabajando en diferentes estudios. En uno de ellos están “monitorizando la eficacia terapéutica de un fármaco para la enfermedad de Alzheimer. Tenemos otro estudio en colaboración relacionado con el autismo; asimismo, estamos trabajando en el estudio de un péptido que puede acumularse selectivamente en determinados tumores y podría tener aplicación en radioterapia; y acabamos de establecer una colaboración para monitorizar si un tipo de nanobody que podría curar el alzhéimer cruza la barrera hematoencefálica y llega al cerebro”.

Por otra parte, en el Laboratorio de Imagen de Resonancia Magnética del centro desarrollan las aplicaciones a nivel anatómico, funcional y metabólico de las técnicas de imagen en el estudio del sistema nervioso central; buscan nuevas técnicas diagnósticas en enfermedades relacionadas con este sistema, desarrollan nanomedicinas para el tratamiento avanzado de enfermedades cerebrovasculares, neurodegenerativas, etc. En el Laboratorio de Biomarcadores Moleculares y Funcionales, sin embargo, están especializados en imagen pulmonar y cardiovascular, y desarrollan, entre otros, biomarcadores de imagen y moleculares para diagnóstico precoz de hipertensión pulmonar y para seguimiento de la eficiencia de nuevas terapias a través de estos biomarcadores.

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